martes, 28 de abril de 2009

Portada



CENTRO DE CIENCIAS BÁSICAS
DEPARTAMENTO DE MORFOLOGÍA

"LOS TESTÍCULOS"

ASIGNATURA: ANATOMÍA

PROFESOR: M. en C. RAMÓN ROSALES GUTIÉRREZ


ALUMNAS:
LAURA JAQUELINE JUÁREZ GUERRERO
CLAUDIA ALEJANDRA VILLA CALDERÓN
VERÓNICA GUADALUPE PEDROZA GARCÍA


CARRERA: MÉDICO CIRUJANO

I SEMESTRE.

ENERO JUNIO 2009

GRUPO "C"

Concepto general

LOS TESTICULOS
Definición
Los testículos son las gónadas masculinas responsables de la producción de espermatozoides y hormonas sexuales masculinas (los andrógenos). Se localizan fuera de la cavidad abdominal suspendidos en una bolsa carnosa llamada escroto o saco escrotal.


Desarrollo
Los testículos se desarrollan dentro de la cavidad abdominal del feto, pero alrededor de dos meses antes del nacimiento descienden o migran a través de la cavidad abdominal y sobre el borde pélvico hasta entrar en el escroto, donde encuentran una temperatura ambiente unos 2 o 3 ºC inferior a la temperatura corporal central. La ausencia de migración causa un proceso conocido como criptorquidia que, si persiste hasta la pubertad, detiene la espermatogénesis y provoca, por consiguiente, infertilidad, ya que a la temperatura corporal los testículos no pueden funcionar normalmente. Los testículos están conectados con el cuerpo a través del tejido escrotal y dos cordones espermáticos que están compuestos por nervios, vasos sanguíneos y los vasos deferentes, o conductos espermáticos.

Cada testículo mide alrededor de 4.5cm de diámetro y pesa aproximadamente 40g; esta formado por un elevado número de de estructuras angostas sinuosas, dispuestas apretadamente, llamadas túbulos seminíferos que contienen las células de Sertoli que nutren al espermatozoide inmaduro dándoles un soporte mecánico y protegiéndolos hasta que puedan llegar a la madurez; también juegan un papel activo en la liberación de los espermatozoides maduros en los túbulos. Entre estos túbulos se extiende el tejido conjuntivo de sostén que contiene las células intersticiales o de leydig responsables de la síntesis y secreción de andrógenos testiculares, en especial de testosterona. Esta disposición anatómica confiere a los testículos una estructura lobular en que cada lóbulo contiene dos o tres túbulos. Los túbulos seminíferos se unen en el vértice de cada lóbulo y alcanzan la primera parte de los conductos excretores, los túbulos rectos.

Los túbulos rectos son conductos cortos y rectos que penetran en el tejido conjuntivo denso del mediastino testicular y dentro de éste forman un sistema de espacios irregulares revestidos de epitelio, la llamada red testicular. A partir de aquí los túbulos drenan a otro conducto sinuoso, el epidídimo que a su vez da lugar a los conductos deferentes.


Función
La función de los testículos es producir espermatozoides y la hormona sexual masculina, la testosterona. Para producir y nutrir los espermatozoides, la temperatura dentro de los testículos debe permanecer aproximadamente 1°C por debajo de la temperatura corporal normal. Parte de la función del escroto es mantener esta temperatura óptima, manteniendo a los testículos más lejos del cuerpo durante el clima caluroso o contrayéndose y llevándolos más cerca del cuerpo durante el clima frío.

Producción de gametos y andrógenos

El testículo adulto produce gametos y andrógenos
En el hombre maduro sexualmente, los testículos desempeñan dos papeles fundamentales que son vitales para su fertilidad y competencia sexual. Estas funciones son:

- Producción de espermatozoides, que transmitirán sus genes y fecundarán al óvulo.

- Secreción de andrógenos testiculares, en especial testosterona, que induce el desarrollo masculino completo.

Los dos principales productos de las gónadas masculinas, los espermatozoides y las hormonas esteroideas androgénicas, se sintetizan en compartimentos diferentes. Los espermatozoides se producen en los túbulos seminíferos, mientras que los andrógenos son sintetizados y secretados por las células de Leydig que se extienden entre los túbulos. De hecho estos compartimentos de los testículos parecen estar separados no solo desde un punto de vista funcional, sino también anatómico, pues que existe una barrera que impide el intercambio libre de materiales hidrosolubles entre ellos. Esta barrera se conoce como barrera hemotesticular y se origina por efecto de las tight junctions que existen entre las regiones basales de las células adyacentes de Sertoli. La barrera homotesticular protege los espermatozoides en desarrollo de cualquier agente deletéreo vehiculizado por la sangre y, de este modo, mantiene un entorno adecuado para su maduración. También impide que los materiales antigénicos que se originan en el curso de la espermatogénesis alcancen el torrente circulatorio y desencadenen una respuesta autoinmune frente a los espermatozoides. Cuando esto ocurre –por ejemplo, como consecuencia de un traumatismo en los testículos--, puede producirse infertilidad. A pesar de que la producción de espermatozoides y la de andrógenos tienen lugar en compartimentos separados, ambas estrechamente relacionadas desde un punto de vista funcional, porque la elaboración de espermatozoides maduros solo es posible si la secreción de andrógenos es normal.

Anatomía testicular

Situación
Los testículos están situados debajo del pene, entre los dos muslos, por delante del periné. Están envueltos por un conjunto de cubiertas con forma de bolsa, llamada escroto. Las dos gónadas no ocupan el mismo nivel, ya que en la mayoría de los hombres el testículo izquierdo baja un poco más que el derecho. Están suspendidos del su extremo inferior por el cordón espermático y están desprovistos de adherencias en la mayor parte de su superficie exterior, por lo que resultan muy móviles en todos los sentidos, pudiendo contraerse y ascender hacia el anillo inguinal.

Migración de los testículos
Los testículos proceden del interior de la cavidad abdominal, a derecha e izquierda de la columna lumbar, al lado de los riñones. Hacia el tercer mes del desarrollo fetal, los testículos abandonan esta región y descienden por el conducto inguinal, atravesando la pared abdominal, arrastrando consigo las bolsas que los envuelve hasta su posición definitiva. En la evolución fetal normal, durante los últimos meses de gestación, los testículos evolucionan en el abdomen y descienden hacia el escroto en el feto masculino.

En algunos casos, al nacer, uno o ambos testículos no han descendido al escroto. Si el testículo no desciende al escroto durante el primer año de vida del bebé, puede recomendarse cirugía para posicionar de forma adecuada el testículo dentro del escroto. El descenso incompleto del testiculos se llama criptorquia.
Antes y después de la reparación testicular:

Número
Los testículos son dos, uno en el lado derecho y otro en el lado izquierdo. Anormalmente puede existir un solo testículo por ausencia del desarrollo del otro, que cuando también falta epidídimo y conducto deferente, se llama monorquidia. Cuando faltan los dos testículos se llama anorquidia.

Tamaño
En los niños el tamaño de los testículos es relativamente pequeño (de 2 a 3 cm de longitud). En la pubertad crecen hasta alcanzar entre 4 y 8 cm de longitud y entre 2 y 4 cm de ancho. Este tamaño se conserva más o menos similar durante toda la vida, aunque a veces se percibe una ligera atrofia en la vejez o un ligero aumento de tamaño debido al consumo de esteroides. El tamaño desmesurado de los testículos se debe en la mayoría de las ocasiones a una hidrocele (acumulación de líquido en la túnica serosa del testículo).

Color, forma y consistencia
Los testículos son de color blanco azulado, a veces rojo cuando están repletos de sangre. Esta coloración se debe a las bolsas que los envuelven. El testículo tiene forma de ovoide aplanado en sentido transversal. Tiene una consistencia dura y algo elástica debido a la capa fibrosa que lo rodea.

Constitución anatómica

Constitución anatómica del testículo
Desde el punto de vista de su
constitución anatómica, el testículo se compone de dos partes morfológicamente muy distintas:

1. Una cubierta fibrosa o albugínea: la cubierta fibrosa recubre sucesivamente el testículo propiamente dicho(albugínea testicular) y al epidídimo(albugínea epididimaria).
1.1 Albugínea testicular: la albugínea testicular es una membrana fibrosa que envuelve al testículo en forma continúa, su superficie exterior se encuentra tapizada por la hojilla visceral de la túnica vaginal y su superficie interior corresponde al tejido propio del testículo. En el borde posterosuperior del testículo la albugínea presenta un engrosamiento denominado cuerpo de Highmore en cuyo espesor se encuentran una rede de conductillos espermáticos denominados
Red de Haller. Del vértice de el cuerpo de Highmore o parten una serie de laminillas o tabiques que se dirigen en forma radiada hacia la periferia del testículo y lo dividen en una serie de lobulillos.
1.2 Albugínea epididimaria: la albugínea cubre totalmente el epidídimo, pero a este nivel es más delgada.


2. Un tejido propio: ocupa todo el espacio circunscrito por la albugínea, en el tejido propio se encuentran: los conductillos productores de esperma y los conductos secretores de esperma.
2.1 Conductos productores de esperma: llenan los espacios circunscritos por los tabiques de la albugínea, de este modo forman los lobulillos espermáticos, constituidos por 3 o 4 conductillos seminíferos, formando una rede o por extremidades libres y se dirigen al cuerpo de Highmore anastomosándose sobre si mismo. Se anastomosan entre si al llegar al lóbulo se unen para formar los conductos rectos.
2.2 Conductos secretores de esperma: se hallan representados en cada lóbulo por un tubo recto que recubre los canalículos seminíferos; anastomosándose ampliamente con el cuerpo de Highmore, los tubos rectos constituyen la
red de Haller; de allí parten de 10 a 15 conductos eferentes que penetran en el epidídimo y se vuelcan en el conducto epididimario, fino conducto enrollado sobre si mismo en 5cm y que se continúa directamente en el conducto deferente.

Vascularización

Venas
El drenaje sanguíneo están encargadas las venas espermáticas. Cuando se obstruyen producen el varicocele.
Inervación
La innervación proviene del sistema nervioso autónomo.
La innervación simpática y parasimpática: la innervación que llega hasta los testículos va a estar dado por el plexo renal, el plexo hipogástrico, y el plexo espermático.
Arterias
Recibe su irrigación a través de tres arterias:
1. La arteria espermática, rama de la aorta abdominal.
2. La arteria diferencial rama de la arteria vesiculodiferencial, que a su vez es rama de la hipogástrica.
3. La arteria funicular, rama de la arteria epigástrica que a su vez es rama de la iliaca externa.

Esta dada por una arteria que viene de la aorta y nace a la altura de L2 esta por debajo de las arterias renales y por arriba de la mesentérica inferior son las arterias espermáticas o gonadales, estas arterias están acompañadas por venas espermáticas que tienen diferentes finales en cada lado; la del lado izquierdo termina en la vena renal y la del lado derecho termina en la vena cava superior.
- Plexo espermático: se origina en el plexo periaórtico y sigue la arteria espermática hasta su terminación.
a) Plexo venoso espermático anterior que también se llama plexo venoso pan piniforme que esta en la celda anterior del cordón espermático; todos estos se van a unir y van a formar la vena espermática.
b) Plexo venoso espermático posterior esta en la celda posterior del cordón espermático, este termina en la vena iliaca externa, va a acompañar a la arteria funicular que es rama de la epigástrica inferior e irriga estructuras del cordón espermático.
Aclaración: La arteria espermática cuando llega al testículo se va a dividir en dos ramas terminales una que va a la cara lateral del testículo y otra que va a la cara medial, pero también tiene ramas colaterales que se van a anastomosar con otras.
La arteria espermática da dos ramas para el epidídimo la epididimaria anterior y la arteria epididimaria posterior; esta última se anastomosa con la arteria deferencial y con la arteria funicular.

- Plexo deferencial: originado en el ganglio hipogástrico cuyas ramas siguen al conducto deferente desde la vesícula seminal hasta la cola del epidídimo.

Vasos linfaticos
El testículo va a drenar linfáticamente a los grupos pre - aorticos y a los latero – aorticos; los vasos linfáticos acompañan a las arterias espermáticas.

Histología

La gónada masculina desempeña dos papeles, uno reproductor (espermatogénesis) y otro hormonal (producción de testosterona). Los testículos están fuera de la cavidad abdominal dentro del escroto, cuyas estructuras son:

► Túnica vaginalis: capa de tejido conectivo duro cuya función es servir de soporte del parénquima testicular.
► Túnica albugínea: cápsula de tejido conectivo que también provee soporte al parenquima.
► Parénquima testicular: compuesto de túbulos seminíferos y células intersticiales
► Túbulos seminíferos: producen los espermatozoides
► Células intersticiales: esparcidas entre los túbulos seminíferos
► Mediastino testicular: núcleo de tejido conectivo dentro del testículo.
► Red testicular -de túbulos colectores – recogen los espermatozoides luego de que pasan por los túbulos seminíferos.
► Vasos eferentes: aproximadamente quince túbulos que cargan los espermatozoides del testículo al epidídimo.
► Túnica dartos: estructura tipo lámina hecha de músculo liso y tejido conectivo elástico, cuya función es servir de termo-regulador del testículo.
► Escroto: capa de piel gruesa velluda protectora del testículo.

Adicionalmente hay varias glándulas sexuales accesorias como las vesículas seminales - glándulas secretoras en pares localizadas dorsalmente a la vejiga- la próstata – con dos lóbulos posteriores que se pueden palpar por vía rectal y uno medio, uretral- segrega un líquido grasoso que lubrica la uretra y contribuye a una pequeña porción del semen, glándulas bulbo-uretrales y uretrales.

Testosterona

Caracteristicas
Las células de Leydig de los testículos sintetizan y secretan testosterona –el principal andrógeno testicular-a partir de acetato y colesterol. Los hombres adultos secretan aproximadamente 4.10mg de testosterona cada día, la mayor parte de la cual alcanza la sangre. No obstante, una pequeña cantidad penetra en los túbulos seminíferos, donde se une a una proteína fijadora de andrógenos secretada por las células Sertoli, y posteriormente interviene de forma decisiva en el desarrollo de los espermatozoides. Al ser un esteroide y, por consiguiente relativamente liposoluble, la testosterona es capaz de cruzar la barrera hemotesticular por difusión pasiva.

Acciones periféricas
La hormona circula en el plasma, unida a la globulina transportadora de esteroides sexuales o a otras proteínas plasmáticas. Penetra en la célula libremente, donde puede convertirse en dihidrotestosterona o en 5-a androstendiona. Los tres andrógenos se unen a proteínas receptoras citoplasmáticas específicas para formar un complejo esteroide-receptor que se desplaza hasta el núcleo e interacciona con el ADN cromosómico. Además pueden unirse a receptores de la membrana plasmático interaccionar directamente con el ADN nuclear, modificando así la expresión genética. En los tejidos existen más receptores androgénicos de los que serían necesarios para cumplir los objetivos específicos de la hormona (crecimiento, maduración etc.). Estos tejidos incluyen los órganos accesorios del tracto reproductor masculino, la próstata, vesículas seminales, y el epidídimo, así como tejidos no reproductores como el hígado, el corazón y el músculo esquelético.
La dihidrotestosterona es importante en el feto para la diferenciación de los genitales externos y, en el momento de la pubertad para el crecimiento del escroto, las próstata y el vello sexual. Además de su papel en la producción de espermatozoides, la testosterona estimula el desarrollo fetal del epidídimo, el conducto deferente y las vesículas seminales. En la pubertad, es responsable del aumento del tamaño del pene, las vesículas seminales y la laringe, y de los cambios en el esqueleto y la musculatura característica del hombre.

Espermatogénesis

Espermatogénesis: Producción de espermatozoides por los testículos

Un hombre sexualmente maduro produce unos 200 millones diarios de espermatozoides. La espermatogénesis es un proceso complejo que implica la generación de un elevado número de células por mitosis y la reducción de la dotación cromosómica por meiosis. También implica la formación de una célula especializada destinada a transportar el material genético al interior del tracto reproductor femenino con el objetivo de maximizar las probabilidades de fecundación.

En la pubertad, las células germinales masculinas se activan para poder iniciar la división mitótica, un acontecimiento que caracteriza el inicio de la espermatogénesis. El resultado es la formación de una población de espermatogonias que se extienden en el interior del compartimento basal de los túbulos seminíferos. Las dos primeras divisiones mitóticas de cada célula germinal dan lugar a cuatro células que permanecen conectadas entre sí por un fino puente citoplásmico. De estas células, tres experimentan una división adicional y forman espermatogónias, mientras que la cuarta se detiene en este estadio y mas tarde servirá como célula pluripotencial para una generación ulterior de espermatozoides.

Las tres células activas se dividen dos veces más dando lugar a los llamados espermatocitos primarios. Hasta aquí, las divisiones celulares tienen lugar dentro del compartimento basal del túbulo, pero en este punto los espermatocitos primarios penetran en el compartimento tubular adluminal. Aparentemente, lo logran alterando transitoriamente las Tight junctions existentes entre células de Sertoli vecinas. Después de un periodo de crecimiento, cada uno de los espermatocitos primarios experimenta dos divisiones meióticas; la primera de ellas da lugar a los espermatocitos secundarios, ya haploides, que se dividen de nuevo inmediatamente formando las espermátides. Cada espermátide posee 22 autosomas (cromosomas no implicados en la determinación del sexo) y un cromosoma X o Y. La progenie de una epermatogonia individual permanece conectada por puentes de citoplasmáticos. Estos procesos completan los acontecimientos genéticos de la espermatogénesis. Los estadios finales, no genéticos, consisten en la conversión de las espermátides, redondas, en espermatozoides móviles maduros, un proceso conocido como espermiogénesis.

Enfermedades

Torcion del testiculo
Es el resultado de la rotación de esta glándula y el epidídimo sobre su cordón espermático.

A través del cordón espermático llegan las arterias y venas que nutren a los testículos, por lo que al producirse la torsión se comprimen estos vasos ocasionando un serio déficit en su flujo sanguíneo. Las consecuencias van a depender del grado de torsión testicular y del tiempo de instalada, pudiendo ir desde una leve congestión de la sangre hasta la muerte del testículo comprometido. Se han observado una serie de factores predisponentes, principalmente anatómicos, existiendo una alteración en la fijación normal de los testículos que les permite una mayor movilidad.

Causas
Las causas inmediatas que van a desencadenar la torsión son un roce o un golpe, zambullidas, contracciones bruscas de los músculos abdominales, durante la defecación o practicar ciclismo.

Síntomas
Inmediatamente después de producida la torsión del testículo el hombre experimenta un intenso dolor en la región testicular e inguinal que se propaga hacia el abdomen. Al intentar caminar o moverse el dolor se intensifica y se torna intolerable por el roce y se ve imposibilitado de poder realizarlo. Habitualmente se acompaña de náuseas y vómitos, transpiración fría y hasta desmayos o desvanecimientos.
La mayoría de los cuadros tienen estas características, siendo muy raro que no se presente con dolor. En algunos hombres puede producirse un aumento de la temperatura corporal.

Al examinar el escroto se observa que los testículos se encuentran ascendidos al ser traccionados por un cordón disminuido en longitud por la propia rotación del mismo.
Una vez realizado el diagnóstico o ante la sospecha del mismo deben adoptarse inmediatamente medias terapéuticas para evitar la progresión del cuadro.El tratamiento quirúrgico es de elección para revertir la torsión. A medida que transcurren las horas el cuadro evoluciona alterando progresivamente al tejido testicular. Cuanto más pronto se realice la cirugía, menores serán las consecuencias que se establezcan.

Enfermedades

Cancer testicular
Es una enfermedad caracterizada por la presencia de células cancerosas o malignas, en los tejidos que constituyen los testículos, pudiendo afectar a uno o a ambos. Estos tumores son relativamente infrecuentes, afectando en su gran mayoría a personas jóvenes, entre 15 y 35 años.

Actualmente, estos tumores son los únicos que tienen un índice de curación entre 80% a 90%. Si bien sus causas no se conocen con exactitud, se han involucrado algunos factores de riesgo, como la criptorquidia (testículo no descendido a su posición normal), en la cual el riesgo es 10 a 40 veces superior en comparación con el varón normal; en cuanto a los traumatismos, se les ha dado un valor exagerado y son más bien un factor que contribuye al descubrimiento del tumor. Otros factores pueden ser la exposición a radiaciones, temperatura elevada y el uso de estrógenos en el primer trimestre del embarazo materno.
Manifestaciones clínicas
En esta enfermedad se observa un aumento del contenido del escroto, no produce dolor, con un crecimiento relativamente lento, sin que se desarrolle un proceso inflamatorio de los tejidos adyacentes al testículo o la piel.
La detección de estos tumores, no suele presentar dificultades, mediante la palpación del escroto pueden detectase anormalidades o masas. La ecografía es un método auxiliar de diagnóstico muy eficaz.

Debe consultarse al especialista en caso de molestias o hinchazón testicular.La mayoría de los enfermos puede curarse con los tratamientos disponibles actualmente.El tratamiento quirúrgico, es el de elección para la mayoría de las personas que padecen este tipo de tumores. Este procedimiento consiste en la extracción de uno a ambos testículos.
Posteriormente y dependiendo del tipo de tumor puede recurrirse a la radioterapia, utilizando rayos X, para destruir células cancerosas y disminuir el tamaño del tumor.

Enfermedades

Inflamación testicular
La orquitis es un proceso inflamatorio limitado al testículo, pudiendo afectar a ambos en forma sincrónica.
La fiebre urleana (parotiditis), representa uno de los pocos ejemplos de orquitis verdadera. Se presenta como una complicación de dicho cuadro sobre todo en los adolescentes y adultos jóvenes, siendo de rara presentación en los niños. El virus de la parotiditis, además de afectar a las parótidas (glándulas salivales), en el 15 al 20% de los casos compromete a los testículos.Diversas bacterias pueden afectar a los testículos, a los cuales llegan por vía sanguínea durante procesos de diseminación general a través del sistema circulatorio. Las bacterias más frecuentemente encontradas como responsables son: Escherichia coli, Klebsiella pneumoniae, Estreptococos, Estafilococos y Pseudomona auriginosa.

Cuadro clínico
En el caso de ser una complicación de una parotiditis, el compromiso testicular aparece luego de cuatro a seis días de instalada aquella, aunque también puede producirse en ausencia de afección de las paratiroides. Aparece como un nuevo cuadro febril, dolor e hinchazón testicular cuando comenzaba a ceder la fiebre de las paperas. En aproximadamente el 70% de los casos es uno el testículo afectado, con algún tipo de atrofia en la mitad de los casos.
En las orquitis de origen bacteriano el testículo se encuentra tenso, hinchado, con una tonalidad azulada y unos puntitos hemorrágicos en la piel. También se acompaña de fiebre, náuseas y vómitos y dolor testicular intenso que puede desplazarse hacia la región inguinal.

Si ambos testículos padecieron la infección existe un elevado riesgo de esterilidad en el futuro, no es así si el compromiso es de uno solo donde el riego es bajo.
Tratamiento
El tratamiento de la inflamación testicular consiste en la realización de reposo, elevación del escroto y colocación de hielo en el lado afectado. Con la administración de analgésicos y antiinflamatorios se consigue una buena respuesta, aliviando el dolor y disminuyendo la inflamación.
En algunos hombres, el cuadro cede en alrededor de una semana sin ninguna secuela, pero en otros, luego de desaparecida la inflamación el testículo afectado puede quedar más pequeño que el opuesto y muy sensible al tacto durante varios años.

Los antibióticos están indicados cuando los agentes responsables son bacterias; si son utilizados en forma temprana pueden prevenirse secuelas importantes.

Enfermedades

Hidrocele

Se define como hidrocele a la presencia de una acumulación de líquido dentro del escroto o bolsa escrotal que es la bolsa o saco que contiene a los testículos. Ésta acumulación líquida puede producirse en el lado derecho o izquierdo del escroto o en ambos (hidrocele bilateral).

La causa del hidrocele puede ser congénita, que se observa habitualmente en los recién nacidos o en los niños; en este caso la causa de la presencia de líquido en el escroto se debe a una comunicación que existe entre el escroto y el interior del abdomen y permite el flujo de líquido entre estos dos sitios.En los adultos en la mayoría de los casos no se puede determinar la causa que genera la formación del hidrocele. Se considera que el hidrocele se produce por una alteración en la circulación del líquido dentro del escroto (ingresa más líquido del que sale). Existen algunas circunstancias como los traumatismos testiculares o algunos procesos inflamatorios o infecciosos del testículo que pueden generar la acumulación de líquido dentro del escroto, situación conocida como hidrocele reaccional. La acumulación del líquido es habitualmente progresiva y puede alcanzar tamaños muy variables.

Síntomas

En general el hidrocele no da síntomas y habitualmente el motivo de consulta es el agrandamiento del tamaño del escroto afectado. En algunos casos puede presentarse dolor o sensación de pesadez en el escroto. No suele presentarse como un dolor testicular intenso y de aparición súbita. Durante el examen clínico del escroto puede ser difícil la palpación de los testículos por la presencia de líquido a su alrededor.

Forma de diagnóstico
En general el diagnóstico se confirma a través de la realización de una
ecografía testicular bilateral, que determina la presencia de líquido dentro del escroto y evalúa las características del testículo permitiendo descartar otras patologías que pueden afectar al escroto y su contenido (los testículos).

Tratamiento del hidrocele
En general el hidrocele no es una amenaza para la vida del paciente. En muchos casos puede estar presente sin generar ningún tipo de inconveniente ni molestia. En otras circunstancias la deformidad que el hidrocele genera y la presencia de dolor o molestias puede hacer necesario el tratamiento de la patología. La corrección quirúrgica es la opción más segura y eficaz para resolver esta patología.
Durante la cirugía se realiza la apertura del escroto (puede operarse a través de la ingle) y a través de esta se extrae el líquido contenido dentro del escroto y se realiza la extirpación de las membranas que rodean el testículo por dentro con el objetivo de evitar que vuelva a acumularse líquido dentro del escroto. Es un procedimiento que se realiza bajo anestesia y que habitualmente requiere corta internación. Las complicaciones postoperatorias mas frecuentes son la acumulación de sangre en el escroto operado (hematoma) y la infección.La punción con una aguja y evacuación del líquido del hidrocele es una alternativa que no resuelve el problema en forma definitiva, ya que en la mayoría de los casos el líquido vuelve a acumularse y además es un procedimiento que no esta exento de complicaciones. Sólo se la utiliza en casos muy seleccionados, sobre todo en pacientes de muy alto riesgo para someterse a una cirugía.

Enfermedades

Varicocele
Se denomina varicocele a la dilatación venosa o várices de las venas que drenan la sangre de los testículos y se encuentran contenidas en el cordón espermático que es la estructura que contiene la vía seminal, las arterias y venas del testículo. Es una condición que se presenta habitualmente en los varones adolescentes y adultos y con menor frecuencia en los niños antes de la pubertad. Es una enfermedad que se presenta en el 15% de la población general siendo el número de casos aún mayor (30% a 40%) entre los varones con
El varicocele se produce como consecuencia de un mal funcionamiento de las válvulas de las venas que drenan el testículo generando la dilatación de las mismas con la consecuente alteración del flujo venoso testicular. El varicocele se da con mucha más frecuencia del lado izquierdo en algunos casos puede ser bilateral siendo mucho más infrecuente el varicocele derecho aislado
Síntomas
El varicocele puede no dar ningún tipo de síntomas o presentarse como una sensación de peso o incremento del tamaño del escroto en varicoceles más grandes. En un grupo importante de pacientes el varicocele se diagnostica al evaluar el escroto y su contenido por otras causas (traumatismos, dolor, etc.). Como se comentara anteriormente se diagnostica la presencia de un varicocele en el 30% al 40% de los hombres que consultan por trastornos de fertilidad.

Diagnóstico
El examen clínico realizado por el urólogo habitualmente hace el diagnóstico de varicocele, revisando al paciente de pie y realizando maniobras que aumentan la presión dentro del abdomen condición que ayuda a evidenciar la presencia del varicocele. El examen clínico puede complementarse con la realización de una
ecografía testicular con evaluación del flujo sanguíneo del testículo (doppler). Por otro lado el examen clínico puede evidenciar, en el lado afectado por el varicocele, la presencia de un testículo disminuido de tamaño.Se estima que el 20% de los varones con varicocele tendrán dificultad para embarazar y sus espermogramas pueden evidenciar una disminución del número de espermatozoides (oligozoospermia), alteraciones en la forma de los espermatozoides (teratozoospermia), disminución del número de espermatozoides móviles (astenozoospermia) y un incremento del número de células germinales inmaduras (espermátides jóvenes). Por lo tanto, no todos los pacientes con varicocele necesitan ser operados y se estima que sólo uno de cada cinco varones con varicocele (20%) tiene indicación de cirugía para preservar o mejorar su capacidad reproductiva.

Tratamiento
Ante la presencia de un varicocele asociado a trastornos de la fertilidad, disminución del tamaño del testículo del lado afectado y en algunos casos que se presenten con dolor persistente puede estar indicada la corrección quirúrgica del varicocele.
El fundamento de la corrección quirúrgica del varicocele cualquiera se la técnica empleada, radica en interrumpir el flujo sanguíneo a nivel de las venas afectadas generando de esta forma un cambio en la circulación venosa del testículo afectado.Existen diferentes alternativas técnicas para resolver el varicocele entre las que encontramos la cirugía abierta con o sin microcirugía, la
cirugía laparoscópica y la embolización de las venas insuficientes (tratamiento endovascular). Independientemente de la técnica empleada es un tratamiento que en general se realiza bajo anestesia y requiere corta internación. La mayoría de los inconvenientes postoperatorios se asocia a complicaciones a nivel de la herida (infección hematoma) pero esta situación se observa en un número bajo de los pacientes operados.
Aproximadamente un 60% de los pacientes mejoraran los valores del espermograma luego de la corrección quirúrgica del varicocele y un grupo importante de estos logrará el embarazo.

Enfermedades

Epididimitis
Es un proceso inflamatorio o infeccioso del epidídimo (conducto que forma parte de la vía espermática y se ubica junto a testículo) habitualmente causado por bacterias, que puede afectar secundariamente al testículo, epidídimo-orquitis u orquiepididimits.

Los gérmenes llegan al epidídimo por contaminación con bacterias a través de la vía urinaria o por vía sanguínea. Muchas veces la presencia de una sonda en la uretra o la instrumentación de la vía urinaria puede generar los cuadros de epididimitis, también las infecciones urinarias pueden ser responsables de las contaminación del epidídimo.
El cuadro se presenta habitualmente en adultos, rápidamente y se caracteriza por la presencia de dolor intenso a nivel del testículo, fiebre y aumento del tamaño del epidídimo o del testículo. El dolor puede también afectar la región de la ingle y pude además asociarse a síntomas miccionales como por ejemplo ardor al orinar.

Existen algunos casos en los cuales la epididimitis se presenta lentamente con un cuadro de dolor no tan intenso, con agrandamientos gradual del epidídimo que puede ser más localizado, conocido como epididimitis crónica. En un número menor de casos puede desarrollarse una afección bilateral.El examen físico del paciente demuestra dolor a nivel del escroto y aumento del tamaño del epidídimo afectado pudiendo además observarse aumento del tamaño y dolor a nivel del testículo cuando éste se encuentra comprometido. Muchas veces puede ser difícil realizar el examen físico debido al intenso dolor.En algunos casos el proceso puede extenderse generando abscesos o acumulación de pus a nivel del epidídimo, testículo y escroto. Si bien en la mayoría de los casos el diagnóstico se realiza en base a lo que el paciente relata y con el examen físico, la ecografía testicular es un método de diagnóstico por imágenes que puede ayudar a confirmar el diagnóstico de epididimitis. Habitualmente se indica la realización de un urocultivo (análisis de orina), en busca de los gérmenes que pueden ser responsables del cuadro.El tratamiento de la epididimitis se basa en la administración de antibióticos, antiinflamatorios, reposo, elevación y hielo a nivel del escroto afectado. Los antibióticos se encargarán de tratar el germen causante del cuadro y las demás medidas de tratamiento tienen como objetivo aliviar el dolor y la inflamación. En la mayoría de los casos este tratamiento será suficiente para resolver el cuadro.La presencia de acumulación o colecciones de pus en el testículo o en el escroto (abscesos) indica la necesidad de un tratamiento quirúrgico para drenaje del mismo.

La epididimitis puede dejar como secuela la presencia de una zona dura al lado del testículo o un leve aumento de tamaño del mismo y por otro lado puede generar la obstrucción de la vía espermática por obstrucción del epidídimo.

Enfermedades

Criptorquidia
Alteración del descenso del testículo hacia el escroto.
Durante el desarrollo del feto dentro del útero los testículos originalmente se forman dentro del abdomen y deben descender atravesando la ingle o conducto inguinal hacia el escroto para completar su maduración. Cualquier alteración durante el proceso de descenso del testículo hacia el escroto puede generar una posición anormal del testículo. El testículo mal descendido puede ubicarse a cualquier nivel del trayecto que debe hacer normalmente por lo tanto se pueden encontrar testículos dentro del abdomen, en el conducto inguinal (que comunica el abdomen con el escroto) o en la parte superior del escroto a nivel del pubis.

Las alteraciones del descenso de uno o ambos testículos es una entidad que se observa en aproximadamente el 20% al 30% de los nacidos antes de término y en 5% de los nacido a término. Es un problema que puede resolverse de manera espontánea durante el primer año de vida o durante la pubertad. Lo habitual es indicar algún tipo de tratamiento hormonal para estimular el descenso del testículo o un tratamiento quirúrgico de descenso y fijación del testículo (pexia testicular) si el o los testículos no descienden espontáneamente.
El diagnóstico de un testículo no descendido se realiza con el examen físico del escroto, momento en el cual el médico constatará la ausencia del o los testículos a nivel de la bolsa. Una vez detectada la falta del testículo dentro del escroto se deberá investigar cual es la ubicación real del o de los testículos. El mismo examen físico podrá revelar la presencia del testículo a nivel del canal inguinal y en caso de no detectarse de este modo se indicarán estudios para realizar el rastreo o detección del lugar donde se encuentra alojado, incluido el abdomen. Entre los estudios que se pueden realizar se encuentran la ecografía, la tomografía computada o los estudios de medicina nuclear como el centellograma testicular. En algunos casos el testículo puede no ser encontrado por medio de los estudios y puede requerirse una cirugía para la ubicación del mismo.

Existen diversos motivos por los cuales se deben estudiar y eventualmente tratar los testículos mal descendidos. Un testículo que no ha descendido adecuadamente puede desarrollar trastornos en la producción de espermatozoides, incluso en los primeros años de vida debido a que los testículos necesitan alojarse a nivel del escroto para producir espermatozoides de manera adecuada. Por otro lado un testículo alojado a nivel de la ingle o en la porción superior del escroto puede estar más propensos a sufrir traumatismos. Otra razón por la cual debe tratarse un testículo mal descendido se debe a que estos testículos están más propensos a desarrollar tumores en comparación con la población de pacientes con testículos descendidos normalmente. Lo importante en estos casos es dejar los testículos accesibles a la palpación tanto por parte del paciente (auto examen) o por parte del médico para poder realizar el control o vigilancia adecuada de los mismos y en caso de detectarse lesiones tumorales poder realizar el tratamiento precoz. En algunos casos cuando se encuentra comprometido un solo testículo y no puede lograrse ubicarlo a nivel del escroto puede estar indicada la extirpación del mismo.
Como se comentara anteriormente en los niños pequeños pueden realizarse dos tipos de tratamientos con el objetivo de ubicar el testículo a nivel del escroto y permitir que estos conserven su capacidad de producir espermatozoides. El tratamiento hormonal con el cual se ayudará al testículo a fabricar hormonas masculinas y este nivel aumentado de hormonas puede favorecer el descenso del testículo. Este tratamiento puede tener mejor resultado cuanto más cerca de la bolsa escrotal se encuentra el testículo. La otra alternativa de tratamiento es la quirúrgica, denominada orquidopexia o pexia testicular, en la cual se realiza el descenso y fijación del testículo en el escroto. Puede realizarse en uno o dos procedimientos y por diferentes métodos; cirugía abierta o laparoscópica.

En el caso de los adultos en los cuales se realiza un diagnóstico de testículo no descendido, el descenso del mismo dentro del escroto sólo tendrá como objetivo hacerlo más accesible a la palpación y el control ya que no se mejorará su capacidad de producción de espermatozoides. Si el testículo no descendido genera molestias y no se puede alojar a nivel del escroto puede estar indicada la extirpación del mismo.